
Enfrentar una acusación de este calibre genera un impacto profundo en la vida de cualquier persona. Por eso, saber cómo defenderse de una denuncia de violencia de género es determinante desde el primer momento. El proceso judicial que se inicia es rápido y tiene consecuencias inmediatas que afectan a tu vida personal, familiar y profesional.
En estos casos, es imprescindible contar con abogados especialistas en violencia de género para asegurar que tus derechos sean respetados en cada fase del procedimiento. A continuación, te explicamos los pasos a seguir frente a una acusación de este tipo y cómo construir una defensa sólida y efectiva.
Primeros pasos tras recibir una denuncia de violencia de género
Recibir una notificación judicial por violencia de género activa un protocolo específico en el sistema penal. Las autoridades aplicarán medidas inmediatas de protección hacia la denunciante, mientras que el acusado enfrentará restricciones que afectarán múltiples aspectos de su vida personal y familiar.
La rapidez en la respuesta determina las opciones disponibles durante todo el procedimiento. Cada decisión tomada en las primeras horas influirá en el desarrollo de la defensa y en las posibilidades de obtener un resultado favorable.
Contactar con un abogado especializado en violencia de género
Lo primero y más importante es contactar con un abogado penalista experto en violencia de género. Este profesional te guiará sobre cómo actuar, qué decir y, especialmente, qué no decir. La asistencia letrada es un derecho que tienes desde el momento de la detención o citación, y ejercerlo es vital. El abogado te explicará los detalles de la acusación, las posibles consecuencias y comenzará a trazar la estrategia de defensa.
En Zugazagoitia Abogados Penalistas, te ofrecemos el respaldo y la experiencia que necesitas para afrontar esta situación con la máxima seguridad jurídica, defendiendo tus derechos desde el primer instante.
Qué no hacer al recibir la denuncia
Los nervios iniciales llevan a cometer errores que perjudican seriamente la defensa. Es necesario que evites ciertas acciones:
- No contactes con la denunciante: bajo ningún concepto intentes hablar con ella, enviarle mensajes o buscar intermediarios. Esta acción se interpreta como una coacción o un intento de obstruir a la justicia y agrava tu situación.
 
- No destruyas pruebas: no borres conversaciones, correos electrónicos ni ningún otro material que, aunque creas que te perjudica, podría ser útil para tu defensa.
 
- No publiques nada en redes sociales: evita hacer comentarios sobre la denuncia, la denunciante o el proceso. Cualquier publicación es susceptible de usarse en tu contra.
 
- No declares sin tu abogado: tienes derecho a no declarar hasta que tu abogado esté presente y te haya asesorado. No te sientas presionado a dar explicaciones sin su asistencia.
 
Derechos fundamentales del acusado
El ordenamiento jurídico garantiza una serie de derechos a toda persona investigada en un proceso penal. Conocerlos y hacerlos valer es esencial para una defensa justa y equilibrada. Aunque la Ley Integral contra la Violencia de Género establece mecanismos de protección para la víctima, estos no anulan tus derechos como acusado.
Derecho a la defensa y asistencia letrada
Como hemos mencionado, este es tu derecho principal. Ninguna autoridad puede privarte de asistencia letrada durante interrogatorios, declaraciones o diligencias de instrucción.
Este derecho incluye la designación de letrado de confianza o, en su defecto, la asignación de abogado de oficio especializado en violencia de género. La defensa técnica abarca tanto la representación procesal como el asesoramiento estratégico durante todas las fases del procedimiento.
Presunción de inocencia y derecho a no declarar
La Constitución Española establece que toda persona es inocente hasta que se demuestre lo contrario mediante una sentencia firme. Esto significa que la carga de la prueba recae en la acusación; son ellos quienes deben demostrar tu culpabilidad más allá de toda duda razonable.
Ligado a esto, tienes el derecho a guardar silencio y a no declararte culpable. Nadie te obliga a declarar en tu contra. Tu silencio no se interpreta como una admisión de los hechos.
Cómo defenderse ante una denuncia de violencia de género
Una defensa efectiva se basa en una estrategia proactiva. No se trata solo de negar los hechos, sino de demostrar tu inocencia. Esto requiere un trabajo exhaustivo de recopilación de pruebas y una actuación procesal inteligente.
Recopilación de pruebas exculpatorias
Tu abogado y tú debéis trabajar juntos para reunir todas las pruebas que apoyen tu versión. Este material es la base para desvirtuar la acusación.
- Pruebas documentales: reúne mensajes de WhatsApp, correos electrónicos, publicaciones en redes sociales o cualquier comunicación que contradiga la versión de la denunciante o muestre un contexto diferente al que ella describe.
 
- Testigos: elabora una lista de personas que puedan testificar a tu favor. Familiares, amigos, compañeros de trabajo o vecinos que presenciaron hechos relevantes o que conozcan la dinámica de la relación y puedan ofrecer una perspectiva objetiva.
 
- Informes periciales: en algunos casos, es útil solicitar informes de peritos. Por ejemplo, un informe psicológico que evalúe tu perfil de personalidad o un análisis informático que verifique la autenticidad y el contexto de unas comunicaciones digitales.
 
Impugnar las medidas cautelares
Normalmente, tras la denuncia se celebra un juicio rápido donde el juez decide sobre la adopción de medidas cautelares, como una orden de alejamiento o la atribución del uso de la vivienda familiar. Tu abogado debe oponerse a estas medidas si no están justificadas, presentando los argumentos y pruebas pertinentes para que el juez las deniegue o las modere.
La importancia de cumplir con la orden de alejamiento
Si el juez finalmente impone una orden de alejamiento, es absolutamente vital que la cumplas de manera estricta. Transgredir una orden de alejamiento es un delito independiente que conlleva penas de prisión. No importa quién inicie el contacto o si parece consentido. Cualquier incumplimiento, por mínimo que sea, tendrá consecuencias penales muy graves y debilitará tu posición en el procedimiento principal.
Consecuencias de una denuncia y la opción de la contrademanda
Las denuncias por violencia de género generan efectos inmediatos que trascienden el ámbito penal. Conocer estas consecuencias permite preparar estrategias integrales que protejan los intereses del acusado en todos los procedimientos derivados.
Consecuencias inmediatas de una denuncia de violencia de género
Desde el momento de la denuncia, podrás enfrentarte a una serie de situaciones complejas:
- Detención y puesta a disposición judicial: es el procedimiento habitual para tomar declaración y celebrar la comparecencia de medidas cautelares.
 
- Posibles medidas cautelares: orden de alejamiento, prohibición de comunicación, salida del domicilio familiar y suspensión del régimen de visitas de los hijos.
 
- Antecedentes policiales: la denuncia genera antecedentes policiales que, aunque no implican culpabilidad, constan en los registros.
 
- Impacto personal y social: el estigma asociado a este tipo de denuncias afecta a tu reputación, tu trabajo y tus relaciones personales.
 
La opción de interponer una contrademanda
Si cuentas con pruebas sólidas que demuestran que la denuncia es falsa y que se ha interpuesto con la intención de perjudicarte, tienes la opción de presentar una querella por denuncia falsa por violencia de género.
Sin embargo, esta acción solo se recomienda una vez que el procedimiento principal haya concluido con una sentencia absolutoria firme. Actuar antes es contraproducente y podría complicar la estrategia de defensa.
Como hemos visto, la defensa ante una denuncia de violencia de género requiere asesoramiento experto y acompañamiento jurídico constante. Para ello, confía en Zugazagoitia Abogados Penalistas, donde encontrarás el apoyo legal que garantiza que tus derechos estén siempre protegidos.
Referencias:
- Consejo General del Poder Judicial. (s.f.). Guías y Protocolos de actuación. https:// poderjudicial.es/cgpj/es/Temas/Violencia-domestica-y-de-genero/Guias-y-Protocolos-de-actuacion/
 - Ley Orgánica 10/1995, de 23 de noviembre, del Código Penal. (1995, 24 de noviembre). Boletín Oficial del Estado, 281, BOE-A-1995-25444. https:// boe.es/eli/es/lo/1995/11/23/10/con
 - Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género. (2004, 29 de diciembre). Boletín Oficial del Estado, 313. https:// boe.es/eli/es/lo/2004/12/28/1/con
 
															

